Darío Porras publica en elnacional.cat que desde que se fue de Catalunya Ràdio, los catalanes no paraban de preguntar qué haría ahora Mònica Terribas. Una de las mejores comunicadoras que tenemos en Catalunya no podía estar sin programa. Finalmente ha aparecido la propuesta que la ha seducido: ‘Nexes’, un programa diferente, con un plató espectacular, que reunirá a 100 personas encima de una colmena gigante explicando qué les pasa y qué piensan de diferentes preguntas de sí o no. Un talk show donde se reunirá con un buen amigo, rival durante siete años en las ondas desde la otra parte de la Diagonal, Jordi Basté.
- Sólo entrar, ya te quedas de piedra viendo el plató de ‘Nexes’…
- Entras y ves la colmena. Es impresionante. Es la auténtica protagonista de ‘Nexes’. Un espacio inmenso y en cada una de las celdas habrá una persona, a un metro y medio de distancia y todo lo que pasa, pasa en la colmena (excepto un espacio para hacer algunas entrevistas más delicadas, un espacio más íntimo, donde estamos ahora). En la colmena haremos preguntas y las personas se moverán hacia el sí o el no en función de las respuestas.
- ¿Es el primer programa que se hace pensando en la pandemia, verdad?
- Está pensado desde el primer día en la covid. Enseguida pensamos, al empezar hace meses a hablar de ‘Nexes’: «Ni el plató más grande de TV3, que normalmente tiene 1000 metros cuadrados, puede ayudarnos a hacer este programa» (‘Nexes’ se hace en un plató polivalente de 2.500 metros cuadrados de la Feria de Barcelona). Aquí tenemos la sensación de que estamos al aire libre y podemos mover a la gente por grupos burbuja cuando entra, se hacen pruebas de antígenos, etc. y cuando están en la colmena, los que quieran se puedan sacar la mascarilla, por la distancia que habrá.
- No habrá público. Habrá 100 participantes. ¿Jordi y tú también responderéis a las preguntas que formuláis? ¿Os mojaréis?
- Es un programa que te lleva a hacerlo. Hablamos de la vida, de las decisiones que hemos tomado cada uno de nosotros en circunstancias cotidianas de todo tipo. Cuando hablas con la gente de la colmena, te sale solo. Aunque Jordi y yo tenemos que tratar de ser muy poco protagonistas de este programa. ‘Nexes’ es el programa de las 100 personas que vengan. Otra cosa es que Jordi y yo somos amigos, nos conocemos hace mucho, y será inevitable que haya algo que expliquemos, porque los dos nos precipitamos mucho al decir las cosas.
- Hacer el programa con Jordi supongo que fue decisivo, pero ¿qué fue lo que te hizo pensar que tenías que hacer este programa sí o sí?
- A mí me lo propusieron cuando yo todavía hacía El matí de Catalunya Ràdio. Enseguida me conectó con una parte de mi profesión que es La vida en un xip. Dediqué años haciéndolo y estudiándolo, porque dediqué la tesis doctoral a los debates. Esto no lo es. Es un programa sobre la vida, pero pensé «Creo que vale la pena hacerlo». Enseguida dije que sí. Sabía también que a Jordi le hacía ilusión. Enseguida nos lo creímos. No sé cómo saldrá, pero yo amo este programa por su dimensión humana y de espontaneidad. Habla de las cosas que nos igualan en todo. ¿Quiénes somos? Somos las cosas que hacemos y las decisiones que tomamos, en un mundo que estamos rodeados de mucha opinión y donde siempre juzgamos a los otros. Aquí no juzgaremos a la gente: la escucharemos.
- Probablemente los espectadores de casa se estarán haciendo las mismas preguntas…
- Claro. Porque si yo te pregunto a ti: ¿estás enamorado de alguien en secreto? Tú lo sabrás perfectamente. Lo preguntaremos en la colmena, pero en casa, habrá gente que estará diciendo: «Oh, oh… ¿Eso me interpela o no me interpela? ¿Sabes»?. No le pediremos a la gente que nos explique lo que no nos quiera explicar. Sólo queremos que la gente se mueva y responda con franqueza, que no quiere decir explicar la intimidad. Lo que haremos será ponernos delante del espejo de la vida.
- Cada programa lo encabezará un verbo…
- Nos ha costado mucho hacer la lista de los 10 primeros verbos. ‘Ganar’, ‘Empezar’… Pueden significar cosas muy diferentes para según qué persona.
- Hay una cosa que este programa ya tiene antes de empezar: la química entre los presentadores. Sois amigos, hacíais lo mismo, separados por la Diagonal… ¿es indispensable esta química para un programa como este?
- Creo que es imprescindible. Jordi y yo somos diferentes en muchas cosas. Él dice que yo soy una persona fría. Un día estábamos todo el equipo y nos preguntamos el uno al otro que nos definiéramos. Y él dijo: «Mònica es una persona fría». Y a mí me dolió…! Porque yo creo que no lo soy, pero ¿por qué lo decía? Porque él es una persona que explota, que dice «Pam!», y yo, por haber trabajado casi siempre en un medio público, me he pensado mucho las cosas que decía, qué dices, como se lo tomarán, etc… Hay un punto más racional que también opera aquí. Él tiene una vitalidad de comunicación de no ponerse ningún filtro y yo pienso más… Este carácter diferente se ve en el programa.
- Parece una combinación perfecta…
- Jordi no me quiere ningún daño, ni yo a él. Al revés, siempre hemos querido lo mejor para el otro, y eso que hemos competido 7 años en la radio. Y hemos seguido siendo amigos. Y él, animándome el día que las audiencias no me iban bien y advirtiéndome de cosas… Hemos mantenido este hilo directo permanente, aunque un colaborador suyo viniera a mi programa y él se rebotara o que quisiera tener primero una entrevista. Eso forma parte de la competencia, pero al final, en la vida, lo que es importante es quien te quiere mal o no, quien te quiere ayudar o no. Los dos sabemos que nos ayudaremos en el directo si uno de los dos patina.
- El día que anunciaste que te marchabas de Catalunya Ràdio dijo públicamente, en antena: «Las sillas de los matinales son puntiagudas»… ¿Qué más te dijo en privado?
- Aquel día oí como lo decía… Y después, Jordi tuvo un gesto, me envió unas flores y me hizo mucho ilusión. Me emociona pensarlo.
- ¿Son tan puntiagudas las sillas de los matinales?
- Sí, especialmente el tiempo que hemos vivido. Ha sido un periodo muy duro, con una crisis económica muy fuerte, una crisis política de dimensiones brutales, en un medio público, y al mismo tiempo, una pandemia. No ha sido fácil. Ahora, he tenido un equipo maravilloso, les echo de menos, son 7 años, son tu familia.
- ¿Sigues escuchando ‘El matí de Catalunya Ràdio’?
- Y tanto. Escucho a Laura por la mañana, cuando voy a caminar por la montaña. Y voy haciendo zapping con Jordi. Con toda naturalidad. La vida son etapas y retos. Y ahora el reto es ‘Nexes’.
- ¿Tenías ganas de volver a hacer tele?
- No. Tenía ganas de volver a hacer un programa que me lo creyera. Hacer por hacer televisión, radio o prensa, no. ‘Nexes’ sí, porque me lo creo. El periodismo se puede hacer de muchas maneras. A los alumnos de la Universidad siempre les digo: «Malo cuando entras y dices: ‘Yo quiero ser el presentador del TN’. Porque no todo el mundo puede ser Toni, Raquel o Coral». El periodismo lo tienes que querer por el oficio que es.
- Ayer volviste a la radio, a RAC 1, en la radio patas arriba, presentando ‘El món a RAC 1’ de tu amigo Jordi Basté. ¿Cómo ha ido?
- Ha sido divertido. Además, estamos en campaña. Y tenían a Pablo Iglesias y Pere Aragonès y dije: «uuuuuuiii». ¿Y sabes aquella sensación que entras y dices: ‘Ah, mira qué bien’, como oyente…? Me lo he pensado muy bien haciendo el espacio de tele con Amela y Broc. Y después hemos hecho una cosa divertidísima con Santi Giménez y Óscar Nin.
- Donde por ejemplo has confesado si duermes con pijama o sin…
- Sí, sí (ríe). Además, han hecho una parodia de ‘El rincón de pensar’, que es uno de los espacios que más quiero de El matí de Catalunya Ràdio…
- ¿Te ha gustado hacer un programa como el de Jordi? ¿te verías en su puesto en el hipotético caso que un buen día él dijera: «Lo dejo. Hasta aquí»?
- (ríe) No… Hay generaciones de jóvenes periodistas que están haciéndolo muy bien. Laura Rosel, Roger Escapa, Bundó… el plantel de periodistas que tenemos haciendo buena radio y haciéndolo muy bien es impresionante. A nosotros también nos tocan nuevos retos y no repetir etapas, hacer cosas diferentes y saber cuándo ya no es el momento de hacer según qué y hacer otras cosas.
