Sergi Estapé escribe en Diari de Terrassa que la radio empezó como una afición. Quería estudiar Periodismo, pero por nota no pudo entrar en esa facultad, y se puso a trabajar en una fábrica de hilo de Rubí. Comenzó en el mundo de las ondas en Matadepera Ràdio y después en Radio 2000. «Hacía un magacín, y hacía de locutora y tenía una técnica, y más tarde aprendí a hacer de técnica», recuerda.
Estuvo un año haciendo radio en Olot y después pasó por Ràdio Valira, en Andorra. Más tarde, pasó por Flash FM y Ràdio Flaixbac, Cadena 100, hasta que aterrizó en iCat FM, donde todavía trabaja. Durante estos años, dice, «he hecho de todo, incluso poner voz a cuñas de publicidad». Ha hecho radio fórmula, entrevistas y otras cosas y asegura que le gusta todo. «Al haberme formado yo misma, he ido picando de aquí y de allá», manifiesta.
La radio era el medio que más le gustaba de siempre y ahora está estudiando Comunicación Audiovisual, «Es una espina que tenía clavada», apunta. En iCat FM también realiza trabajos de redes sociales, y actualmente pone música durante una hora. «La radio está muy viva, pero está sufriendo una transformación».
Opina que, a pesar de las nuevas plataformas de música, como pueden ser Spotify, «la gente a veces necesita compañía y oír a la locutora». Cree que «en la radio está todo inventado, pero se pueden hacer las cosas de manera diferente».
Entre sus aficiones destaca la lectura. También participa haciendo pódcasts para InOutRadio, una emisora »hecha para los colectivos de lesbianas y bisexuales», de hace doce años, comenta.
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