Sin duda la radio española sigue atravesando la peor época de su historia. A la caída de audiencia provocada por la incapacidad para atraer al medio al público más joven, se suma el duro impacto que ha tenido la Covid en sus ingresos. Según datos de Invertia, el desplome ha sido de al menos un 30% en los primeros nueve meses del año. Las campañas han dejado de planificarse porque los anunciantes han reducido drásticamente sus inversiones en publicidad ante el temor a no obtener el retorno necesario.
El grupo Atresmedia (dueños de las cadenas de radio Onda Cero y Europa FM) aportan cifras desgarradoras en su informe trimestral enviado a la CNMV. La inversión en el mercado de publicidad en radio cayó un 29,2% hasta septiembre, según sus estimaciones internas y un 35% según otras fuentes.
Las grandes emisoras facturaron en el periodo enero-septiembre del pasado año 296 millones de euros, según las cifras de Infoadex, lo que significa quna périda de ingresos cercana a los 90 millones de euros menos.
A tenor de la cuota publicitaria de las grandes cadenas al finalizar 2019, la más perjudicada está siendo la cadena SER cuyo 40,5% de cuota le supondría según las cifras anteriores, 35 millones de euros menos. Un roto destacado si consideramos que en todo 2019 facturó 169 millones.
La COPE, cuya participación en el mercado radiofónico español está en torno al 27%, estaría dejando de ingresar unos 24 millones (en 2019 facturaron 113 millones).
Onda Cero, según sus cuentas presentadas confirma una caída de sus ingresos hasta los 44,5 millones de euros, 14,6 millones menos que igual periodo del año anterior. Por su parte Atresmedia cuya cuota es del 19% ingresó 79,7 millones en 2019.
A diferencia de las emisoras públicas, la radio privada vive exclusivamente de ingresos publicitarios, pero los anunciantes creen que la crisis reducirá el consumo por mucha publicidad que hagan. Por tanto se impone según ellos un frenazo a los presupuestos. la segunda ola de la pandemia ha truncado la esperanza de remontar en el segundo semestre del año. ¿Qué esperar para lo que queda de año? Con las cifras que arrojan los contagios e ingresos, los confinanmientos y toque de queda, el impacto continuará.
Control de costes en la radio
La única salida para la radio es endurecer el control de costes mediante fórmulas que no descartan los despidos, al menos durante 2021 ya que hay ciertos puestos en las emisoras sin utilidad, como los técnicos y periodistas que se desplazaban habitualmente a los eventos deportivos. Con las restricciones del Covid solo se permite la entrada a un profesional por cada medio a los campos de fútbol.
Los técnicos de estudio tampoco se libran, ya que muchas estrellas del medio así como redactores, llevan meses teletrabajando, lo cual resta utilidad a parte del personal cuya vigilancia por la calidad y control del sonido ha disminuído mucho. Y por si fuera poco el final de la pandemia no garantiza el regreso a la normalidad, ya que los directivos de las cadenas se han dado cuenta de que con menos recursos humanos también se pueden sacar adelante los programas.
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