Crónica Global informa que la Corporació Catalana de Mitjans Audiovisuals (CCMA), el ente público que gestiona TV3 y Catalunya Ràdio, pide a la Generalitat que aporte 100 millones de euros públicos más en 2023 a su televisión y radio públicas, cuyo coste anual ya ronda los 300 millones de euros.
Así lo ha reclamado este viernes la presidenta de la CCMA, Rosa Romà, quien considera que estos dos medios públicos deberían tener a su disposición un 25% más del dinero que ya cuestan a los contribuyentes a pesar de la crisis económica.
En una comparecencia a petición propia en la comisión de control de la CCMA en el Parlament para explicar su «plan estratégico», Romà ha lamentado lo que considera «infrafinanciación crónica» de TV3 y Catalunya Ràdio. Así, se ha quejado de la que el gasto en estos dos medios por parte de la Generalitat se ha reducido, según ella, en un 34% desde 2011, pasando de 458 millones al año a 301 millones.
«Impulso de la lengua catalana»
Romà esgrime que los medios de comunicación afrontan una transformación, que la CCMA desea «poder competir» y que uno de sus puntales es elaborar un nuevo «plan estratégico».
El plan en cuestión aborda, según ha dicho, 18 objetivos y 67 líneas de actuación en siete ámbitos: el «impulso de la lengua catalana», la «conexión» con la ciudadanía, la creación de contenidos, la transformación interna, las relaciones con el sistema audiovisual y la sostenibilidad empresarial.
Más público infantil
En este sentido, la CCMA ha incidido en la importancia de crear una gran plataforma de contenidos en catalán capaz de competir con otras en el ámbito digital, para lo cual ve indispensable una «financiación adecuada», según sus palabras.
Romà considera también necesario este dispendio de dinero público para adquirir derechos digitales, desarrollar el nuevo proyecto infantil de TV3 y Catalunya Ràdio y renovar equipos.
La presidente de la CCMA intenta trasladar al Govern esa «necesidad» de recibir más dinero de los contribuyentes catalanes para estos dos medios, y dice que no tener presupuesto en 2023 les dejaría una situación «más frágil» y retrasaría decisiones que quieren introducir en lo que llama proceso de «refundación».
Mofas sobre los campos de exterminio nazis en su nuevo programa nocturno
Por lo que respecta a la nueva programación de TV3, una de las preguntas ha sido sobre un supuesto chiste de su recién estrenado programa nocturno Zona Franca, cuyo presentador, Joel Díaz, Cataluña se refirió en estos términos a la feria del libro de Frankfurt: «Cataluña ha enviado a muchos libreros. Por tanto, en Alemania no se veían tantos catalanes muertos de hambre desde que cerraron Mauthausen”. El público no se rió y el presentador reaccionó diciendo: “No, ¿no? Aún no… ¿no ha pasado tiempo suficiente, todavía, no, para que haga gracia esto?”.
El director de TV3, Sigfrid Gras, ha argumentado que la dirección del programa ha pedido disculpas en privado a Amical Mauthausen por si se habían sentido ofendidos, ha dicho que personalmente no le hizo gracia y ha pedido más tiempo para acabar de «modular» una propuesta que, según él, quiere ser «innovadora».
Sin disculpas públicas
Sin embargo, Gras ha justificado también que el programa en cuestión no haya pedido perdón en público con este argumento: «Consideramos que todavía sería más negativo disculparse en el programa porque la gente iría a buscar de qué nos estábamos disculpando» (sic).
De este modo, TV3 ha desatendido la petición de disculpa pública formulada en privado por Amical Mathausen, según El Triangle. Gras considera suficiente un correo electrónico que le envió el director del programa, Adrià Serra. En lugar de una rectificación, días después, además, un colaborador de Zona Franca, Adri Romeo, continuó con el escarnio.
Romeo dijo que había escrito un libro y lo presentó diciendo: “Es como el diario de Ana Frank, pero este no lo ha escrito mi padre. Este lo he escrito yo”. Ante semejante exabrupto, Joel Díaz reaccionó diciendo “uy, uy, uy”, y su colaborador le preguntó: “¿No querías que hiciera ese chiste, no?”. El presentador contestó entonces: «No, porque tenemos unos problemas…». “Lo he visto. Vaya hijos de puta”, replicó Romeo. Tras lo cual, Díaz dijo: “Ya, después… amigos del Amical”, haciendo la señal de telefonear con la mano. Pero Romeo insistió: «Hay que ser muy hijo de puta para hacer esto que están haciendo». “Que acabas de hacer tú”, le dijo Díaz. Y el colaborador preguntó si podía cortarse ese pedazo de la emisión. Pero siguieron hablando del libro de Romeo.
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Y no les dá vergüenza pedirlo con la que está cayendo? para emisoritas de radio y televisioncitas aburridas