Francesc Puig escribe en La Vanguardia: Con la mirada ya puesta en el 2024, cuando se cumplirá el centenario de la llegada de la radio a España con el nacimiento de Radio Barcelona que puso en marcha la Associació Nacional de Radiodifusió (más adelante Ràdio Associació de Catalunya), ayer se celebró la gala de entrega de la 22.ª edición de estos premios radiofónicos centrados en el área de habla catalana.
En diferentes categorías (local, inclusiva, a la profesionalidad, excelencia…), estos galardones premian, en palabras del presidente de la entidad Jordi Margarit, “una radio rigurosa, profesional y honesta” que “en estos tiempos convulsos que nos toca vivir con la pandemia, la invasión de Ucrania o el caso Pegasus es cuando ha vuelto a demostrar ser la referencia informativa lejos de concesiones al dramatismo de otros medios y todavía más, lejos de paranoias conspirativas de las redes. ¡Suerte de la radio!”, proclamó en el discurso inaugural Margarit, quien destacó que “no somos líderes por hablar en catalán, sencillamente, la mejor radio se hace en catalán”.
El presidente del organismo, Jordi Margarit, ya puso la mirada en la celebración del centenario de la llegada de la radio a Catalunya que tendrá lugar en el 2024.
Laura Fa y Marc Giró fueron los presentadores de esta gala celebrada en el auditorio del ONCE ya con presencia de público tras dos ediciones afectadas por la pandemia. Los primeros premiados de la noche fueron el youtuber Pol Bassó, los periodistas Lluís Flaquer y Christian Garcia y la locutora Maria Glòria Farrés (70 años dedicados al medio), que recibieron las menciones de honor, mientras que Núria Solé recogió, en nombre del equipo del TN Comarques de TV3, el Guardó Audiovisual 1924.
Más galardonados de la noche fueron, entre otros, en el apartado a la Excelencia «La torre de vidre», de Catalunya Ràdio; como mejor programa de radio «El matí i la mare que el va parir», de Ràdio Flaixbac; y en el apartado dedicado a la Inclusión, «Oh my goig». El podcast, de Betevé.
En la categoría de Innovación recogieron el premio Santi Giménez y Malcolm Otero, responsables de la sección Il·lustres execrables, del Via lliure que conduce Xavi Bundó en RAC 1. “Queríamos desmitificar a los personajes admirados y demostrar que detrás de un gran hombre hay un gran execrable”, dijo Giménez mientras Otero añadía: “Esperábamos que seríamos despedidos al tercero o cuarto día y, mira por dónde, hemos conseguido un premio”.
La presidenta del Parlament, Laura Borràs, hizo entrega del premio al mejor profesional a Jordi Armenteras, actual delegado de RAC 1 en Madrid, quien reivindicó el momento dulce que vive la radio, destacando la máxima que “es muy difícil tener credibilidad y sumar oyentes y demasiado fácil perderla y restar”.
Armenteras señaló como principales retos que tiene la radio hoy “desnudar el ascenso de la ultraderecha y el retroceso que tenemos como sociedad”. “Y un inciso, lo hacemos en catalán, por mucho que algunos no entiendan que es nuestra lengua y nuestra manera de vivir. Y que lo tengamos que reivindicar en el 2022 es una vergüenza”, continuó, añadiendo que más de 1,6 millones de los dos millones que escuchan la radio generalista en Catalunya lo hacen en catalán. «¿Hemos tocado techo? ¿Verdad que no? Pues tenemos que seguir evolucionando y adaptarnos para ser felices con la radio”.
En el palmarés de los premios Ràdio Associació de este año también figura el programa «Les veus de casa», de Ràdio Benicarló, galardonado como el mejor programa de radio local.
Finalmente, también han recibido el reconocimiento del jurado con sendas menciones de calidad al programa de radio Sa Porta, de IB3 Ràdio; L’esport al punt, de Ràdio Cornellà, como programa de radio local; Heroïnes anònimes, de Tarragona Ràdio, en la categoría de inclusión; y La veu és màgica, de Ràdio Caldes, en innovación.
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