Andrea M. Rosa Del Pino le ha entrevistado para El Mundo:
El presentador aclara a LOC que su programa ‘Alta tensión’ no ha sido cancelado. «¿Sabes cuál es el problema? Que, de repente, alguien saca una información y los demás medios se hacen eco de eso sin contrastar», afirma.
Hace nueve meses, Christian Gálvez (41) comenzó su aventura como locutor en Cadena 100. Un trabajo que, según él mismo, le ha traído un sinnúmero de alegrías.
Entre ellas, conocer a sus grandes ídolos -como Sergio Dalma- y convertirse en partícipe de Por ellas, el concierto solidario, que va en ayuda de la Asociación Española Contra el Cáncer. «Esta noche me subo contento a un escenario. Pero, aunque tenga la capacidad de disfrutarlo, hoy mi compromiso es que disfruten los y las demás. Sobre todo, las mujeres que luchan contra el cáncer, que son nuestras protagonistas», comentó a LOC, este sábado, desde el WiZink Center.
- Definitivamente, este ha sido su año: está triunfando como locutor en la radio y, además, como autor con su último libro Hannah. ¿Ya está pensando en su próxima novela?
- Estoy intentando centrarme en Hannah y en mi programa Alta tensión y en seguir en la radio. Sobre todo, porque la pandemia me paró. Por un lado, el covid paró los proyectos televisivos y, por el otro, me paró justo cuando acababa de montar mi productora Fénix Media, que ahora está empezando a renacer de sus propias cenizas. Además, estoy saliendo de gira con Hannah. Algo importante, porque yo saqué el libro el 7 de marzo de 2020 y el 15 el planeta se fue al carajo. Así que imagínate. Un año después el libro está renaciendo.
- Recientemente, algunos portales sugirieron que Telecinco no estaba interesado en continuar con Alta tensión, debido a las bajas audiencias. ¿Usted confirma que el programa sigue?
- Es que nunca se fue… ¿Sabes cuál es el problema? Que de repente alguien saca una información, dice «cancelado Alta Tensión» y los demás medios se hacen eco de eso sin contrastar. Y yo claro que vuelvo. Tengo mi contrato y mi calendario, que va así: grabamos un mes y medio, paramos un mes y medio, grabamos un mes y medio, paramos un mes y medio. Eso es lo que pasa, no nos hemos ido nunca. Paramos las grabaciones, pero porque no vamos a grabar un 25 de octubre el programa que se emite el 4 de mayo…
- Y cuando lee esas noticias falsas, ¿qué es lo primero que se le viene a la cabeza?
- Yo me río porque cada vez las leo menos. Mira, no tengo WhatsApp, me quité Twitter y de salud mental voy de puta madre. Entonces, me da igual. ¿Sabes qué pasa? Que creo que el problema llega cuando te lo tomas de manera personal, cuando crees que es un ataque personal hacia Christian Gálvez. Y yo, como no me tomo ya nada personal, pues entiendo que cada uno tiene que hacer su negocio y hay gente que lo hace con honor y hay gente que lo hace sin honor.
- ¿Hubo algún incidente, en particular, que lo llevara a dejar Twitter?
- ¡No! Lo que pasaba es que me metía a Twitter y decía «venga, ¿a quién están linchando?» y ese alguien, tarde o temprano, iba a ser yo. Porque inexorablemente iban a haber comparaciones con Alta tensión y Pasapalabra. ¿Y para qué pasar por esto? Es perder parte de mi vida.
- Entonces, ¿fue una forma de curar su salud mental?
- No hacía falta curarla, ¡era para que no empeorara! Y ahora me dedico a vivir el día a día y a disfrutar de lo que hago. Porque la vida nos ha enseñado que puede durar muy poco.
- A propósito de salud mental, ¿usted va a terapia?
- Ahora no, pero he ido, claro… Pero, ¿por qué hay miedo a decirlo? Yo cuando me duele el cuerpo, voy al fisio y cuando me duele la mente, voy al psicólogo. Y volvería a ir. Solo que ahora no me hace falta, porque hago artes marciales y me va de puta madre. Pero sí que he ido. Y he ido por una mala gestión del éxito, no por un fracaso.
- ¿Y ahora cómo está siendo su gestión del éxito?
- Como siempre. Con los pies en el suelo y con una dosis de saborear lo efímero. Hoy estás, mañana no estás, hoy puedes trabajar, mañana no puedes trabajar… Y espero dar el 100% en lo que dependa de mí.
- Hablando de gente que lo da todo, a Roberto Leal, el presentador de Pasapalabra, su ex programa, le han dado el Premio Ondas. ¿Lo ha felicitado?
- Le he felicitado pública y privadamente. Lo puedes ver en su Instagram. Me parece un profesional como la copa de un pino. Pero en el tema de Pasapalabra no voy a entrar porque, al final de todo esto, ese va a ser el titular. Así que no.
- Hablemos entonces de sus nueve meses en Cadena 100, ¿cómo le va? ¿Cada día mejor?
- Estoy viviendo momentos mágicos. Por ejemplo, mira, ahí está Sergio Dalma, que es el invitado a mi programa la semana que viene… Y es muy guay poder abrazar a la gente que llevas admirando toda la vida.
- Cada sábado tiene un invitado, ¿cuál es el personaje más guay que ha conocido hasta ahora?
- ¿Sabes qué pasa? Que decir «este es el más guay» es discriminar a todos los demás y yo ya no estoy en ese modo. Hace dos años estaba en ese modo. Pero ahora no te diría ni cuál es guay, ni cuál no es guay. Es que para mí es un honor poder contar con todos ellos.
- ¿Y qué le aporta la radio, que no le aporte la tele y viceversa?
- Ahora mismo, el directo, que te obliga a estar en alerta, no en tensión, todo el rato. En la radio es el aquí y el ahora y, si fallas, está el fallo ahí. Además, uno siempre quiere explorar y que te pongas a hacer radio también es un honor. Porque nunca sabes cuánto va a durar la tele, la radio o la vida… ¡Así que a disfrutar!
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