Cena Aniversario del programa Encarna de noche

Recreación periodística histórica

Entre música, bailes, aplausos y rodeada de sus colaboradores y casi dos mil personas, anoche se celebró la cena aniversario (el primero) del programa Encarna de Noche que se emite desde los estudios de Radio Miramar de Barcelona. Los asistentes al evento en el Hotel Playafels de Castelldefels, pagaron 1.500 pesetas por cenar acompañados de Encarna Sánchez, una comunicadora cuyo programa se ha convertido en un prodigio seguido por miles de oyentes cada noche.
La gala homenajeó a figuras relevantes que habían destacado por sus hechos, como los doctores Barraquer y Prades, los cuales fueron ovacionados por sus intervenciones quirúrgicas gratuitas. Aunque también se premio a gente sencilla como José Nicolás, quién después de pasar por Andorra y no hallarlo, no dudó en desplazarse hasta Marsella en tu automóvil para buscar un medicamento necesario para salvar la vida de un niño. También hubo merecidos aplausos para “el currante de Sabadell”, quien se llevó a casa 4 niños abandonados y otros casos de carácter humanitario protagonizados por personas sencillas.

Una brillante trayectoria en Radio y Televisión



Nacida en Almería, en el seno de una humilde familia, Encarna Sánchez empezó su andadura profesional en Radio Almería. En 1965 puso en marcha en Madrid su célebre “C.S. y buen viaje” (el nombre correspondía a la marca patrocinadora), el programa que la convirtió, en palabras de un suplemento de El Periódico, en la “esposa-madre-novia del españolito proletario que soñaba, en pleno boom desarrollista con un desclasmiento social a lo Manolo Escobar”.

«me insultaban por teléfono por no ser catalana»

Tras 5 años en antena, en 1970 dejó la radio española para marchar a la radio de México, la TV de Colombia, Puerto Rico, Santo Domingo, Los Angeles y Guatemala. El pasado año, volvió a España para lanzar “Encarna de noche”, aunque su integración en el sistema catalán no ha sido fácil según ha declarado la propia locutora: “A los quince días de empezar el programa pensé en marcharme porque, entre otras cosas desagradables, me insultaban por teléfono por no ser catalana.” Por suerte, la inspiración le vino paseando por las ramblas barcelonesas, llegando a la conclusión de que era ella, por haber venido de fuera, quien debía hacer un esfuerzo de integración personal en la sociedad catalana.