La región se encuentra en plena transición económica para evitar la despoblación: «Mirar al pasado es esencial para mirar con esperanza al futuro».
La Ventana sigue el consejo de Carlos Gardel y vuelve a Ponferrada. En su tango cantaba eso de «que 20 años no es nada». Ante esto, nos preguntamos, ¿qué supone duplicar esa cantidad? Radio Bierzo cumple cuatro décadas de emisión. Un periodo que le ha permitido ser testigo directo del cambio en la región. Desde la crisis de la minería del carbón o el crecimiento de localidades de ladrillo hasta la pérdida de población. Una tierra que brega por proteger su futuro sin olvidar el pasado.
El Castillo de los Templarios, con siglos de historia en sus muros, se erige, paradójicamente, como una oportunidad de futuro. Ponferrada es uno de los puntos claves en el Camino de Santiago. Especialmente en invierno, en su trazado francés y en año Xacobeo, como ocurre en este 2022. Además es un enclave radiofónico en el mapa nacional. Pues es la tierra de Luis del Olmo, protagonista de nuestras ondas y quien, como Carles Francino en esta ocasión, se sentaba frente a un micrófono con la Virgen de la Encina muy presente.
«Este castillo Ilumina el corazón del núcleo de Ponferrada, que después de siglos de ruina mira al futuro», explica Javier García Hueso, director del monumento. Explica que este «conjunto extraordinario» es el castillo de mayor superficie de la comunidad y, además, «ofrece el mayor recorrido para quienes quieran abrir la ventana tras su reforma», que se ha culminado hace algunos meses. Actualmente cuentan con un importante patrimonio artístico.
«Estas láminas son algunas de las obras del viaje alrededor del mundo de Magallanes», explica García Hueso en el paseo inicial que realiza junto a Francino. Conforman más de 2.000 obras que hacen de la fortaleza «un templo del placer». Y es que es el director del Castillo de los Templarios considera que «mirar al pasado» es esencial «para mirar con esperanza al futuro». «Y esta sala está llena de quienes han reconstruido esta fortaleza», comenta al culminar una guía exprés ante de entrar en ese estudio improvisado de radio.
Crisis de la minería
En este espera Fernando Tancón. «Tenía 18 años cuando abrió Radio Bierzo, era un joven esperanzado que esperaba música moderna en aquella emisora». Y es que la región vivía un «un momento bullicioso en lo musical» gracias a la movida madrileña que resonaba en la región. Desde 1992 dirige esta emisora, por lo que ha comprobado la evolución de la localidad. «Mirando el retrovisor, recuerdo una ciudad alegre y bulliciosa, cuando se mueve el dinero se engrasa todo», comenta no sin cierto lamento.
Y es que El Bierzo ha perdido el músculo económico que tenía en tiempo de la minería del carbón. Tras este han llegado otros problemas como la despoblación. Que se agrava con el envejecimiento de sus habitantes y el éxodo de los más jóvenes en busca de futuro. «Cuando desparece ese flujo de millones del carbón, no llega la transición a otra actividad», señala Tancón. Una de esas generaciones que ha emigrado se encarna en Pablo Morán.
Despoblación
El jefe de internacional de la Cadena SER explica que abandonó su Ponferrada natal hace más de una década. Comenta que aquella época de plenitud económica, con su consecuente crisis, le ha permitido observar con otra perspectiva el conflicto de Ucrania. «Nos hemos dado cuenta de la importancia de la energía con la guerra, pero en Ponferrada convivíamos con esa realidad del carbón», matiza. Aunque destaca que «paradójicamente», la mayoría de su grupo de amigos han regresado a la ciudad después de emigrar.
La otra cara de la moneda la representa Verónica Ortega. Es enóloga y andaluza, pero ha encontrado en las viñas de El Bierzo una oportunidad para cumplir con uno de sus sueños: conseguir los mejores caldos del país. «Tenía grandes amigos que me contagiaron eso del vino que se elabora en El Bierzo», explica sobre el motivo de su mudanza. Y es que, según su experiencia, la región «tiene una cultura viejísima y muy popular». «A pie de calle se palpa muchísimo, la vendimia la comparten todos», comenta.
Bodegas Verónica Ortega tiene su sede en Valtuille de Abajo, «en el centro neurálgico del valle». Dice la enóloga que solo tiene 40 habitantes, pero aproximadamente 10 bodegas. No tiene ninguna vinculación familiar con este mundo. Su padre era torero, pero le ha dedicado uno de sus productos, el Quite. «El mes de la vendimia es el más preocupante, aunque emocionante, pero cada vez es más común que se adelante por el clima, que es más cálido y seco», denuncia.
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