Alnavio.com cuenta que la venezolana Verónica Ortiz, que estudió artes en Florencia, la cuna del Renacimiento, retomó sus conocimientos y experiencia en radio y se lanzó, junto a un sobrino chef y un hijo productor, a conquistar el público madrileño con el programa Movida Gastronómica en la 107.2FM, que también puede ser visto por Instagram Live y seguido por Twitter.
Gracias a sus ascendientes italianos, Verónica Ortiz La Loggia se paseó por las callejuelas de Florencia durante poco más de tres años cuando salió de Venezuela en 2016, tiempo en el que pulió su italiano casero y profundizó sus conocimientos sobre el arte, para tratar de emprender en Italia.
Sin embargo, no encontró en la “bella Toscana” el camino para el desarrollo profesional y se fue en 2019 a Madrid, sacó su portafolio de experiencia y retomó la actividad radiofónica que ejercía en Venezuela, para poner al aire el programa Movida Gastronómica, que se transmite desde el pasado 9 de septiembre por Suena FM, en el dial 107.2, los lunes, miércoles y viernes, a partir de las dos de la tarde.
-El concepto de programa gastronómico ya lo habíamos trabajado en Caracas. Por eso nos presentamos con una idea bien estructurada ante Alejandro Marín, el director de Suena FM, aquí en Madrid en julio, y el 9 de septiembre ya estábamos al aire -comentó al diario ALnavío la actriz y locutora, que durante ocho años mantuvo al aire en Caracas un programa de corte similar en la emisora La Romántica del Circuito FM Center.
-Movida Gastronómica se ha creado para informar a los oyentes de las tendencias actuales de gastronomía, restaurantes locales, y eventos culinarios que se realizan y proyectan en Madrid. Las secciones engloban una variedad de contenidos gastronómicos de actualidad, tips de gastronomía, nutrición y vida sana, entrevistas nacionales e internacionales, promociones y concursos, que conectan con nuestra audiencia.
Emprendimiento familiar
A Verónica Ortiz la acompañan ante los micrófonos Daniel Ortiz Bieliukas, sobrino, quien trabajó como productor del programa en Caracas, antes de ir a España a estudiar en el Instituto María de Zayas y Sotomayor, donde se graduó de chef, para luego pasar una larga temporada en los fogones de un hotel boutique en Alemania.
Al frente de la producción de Movida Gastronómica está Diego Llerandi Ortiz, hijo de Verónica, lo que convierte este proyecto radiofónico en un emprendimiento familiar.
Radio y redes sociales
Para Verónica Ortiz no ha resultado complicado adaptarse a la forma de hacer radio en Madrid. “Es muy similar a lo que veníamos haciendo. Sólo he tenido que cambiar un poco el vocabulario, en cuanto a términos gastronómicos y de uso cotidiano”.
- ¿Cuál es la fórmula comercial del programa?
- Tenemos un acuerdo de porcentajes con la radio. Conseguimos patrocinantes de lado y lado. También tenemos planes de hacer eventos gastronómicos. Nuestro programa tiene contenidos variados. Venezolanos, españoles e internacionales.
La producción de Movida Gastronómica está pensada para ser equilibrada en cuanto a contenidos se refiere. “Aunque aquí en Madrid hay muchos emprendimientos gastronómicos venezolanos, lo que nos haría más cómodo explotar esa vertiente, queremos mantener un equilibro, porque nos escucha gente de diversas nacionalidades, españoles, colombianos, dominicanos, peruanos”.
Los programas se pautan con semanas de antelación, porque hay mucha gente interesada en participar. “Con cuatro meses en el aire ya recibimos invitaciones para la cobertura de festivales, como el ya tradicional ‘Tapapiés’ del barrio de Lavapiés, por ejemplo, o el Madrid Fusión que estaremos cubriendo esta semana”.
-La gastronomía en Madrid es muy rica, aquí puedes encontrar locales con cocina de todo el mundo, y no creo exagerar. No podemos encasillarnos en un solo tipo de contenidos -continuó la animadora radial.
El nombre del programa, Movida Gastronómica, se escogió para dar continuidad a lo que hacía en Caracas que, en su momento, fue una de las ciudades del mundo con mayor cantidad y calidad de restaurantes de todo tipo, como es en la actualidad Madrid.
-Cuando empezamos el programa en Caracas en 2008, había toda clase de actividades, festivales promocionados por embajadas, degustaciones, catas. Lanzamientos, aperturas de locales. Aquí, en Madrid, también se están produciendo cosas similares, hay muchísimo de donde obtener contenidos para el programa. A veces, humanamente, no podemos cubrirlos todos.
Entre los proyectos de Verónica Ortiz está darle al programa un corte televisivo, cosa que, si se ve desde la perspectiva de la trasmisión por redes, ya es un hecho.
-Tenemos un público interesante que nos sigue por redes. Dimos continuidad por Twitter con @mgastronomica, cuenta que tiene 8.195 seguidores y con el Instagram de Madrid @movidagastronomicafm tenemos 649 seguidores, lo estamos trabajando. Todos nuestros contenidos de redes sociales tienen fotografías y videos realizados por Leandro Ventura.
Rubia, de fácil sonrisa y una dicción muy buena, Verónica Ortiz contó que, además de trabajar en diversas televisoras, estudió y se graduó en la Escuela de Artes de la Universidad Central de Venezuela, en mención cinematografía.
Por ello se maneja de forma eficiente en el tema audiovisual. Lo cual resulta muy efectivo al momento de promocionar y mostrar a través de Instagram o YouTube lo que se hace en cabina y en coberturas especiales fuera de la radio.
-En un futuro pensamos ampliar la duración del programa y extender los días de transmisión, pero queremos ir poco a poco.
Verónica dice que con lo que están haciendo está contenta. “Estoy satisfecha. Trabajamos en lo que nos gusta y somos bien recibidos por todo el mundo, porque a través de las redes y el streaming de internet, nos pueden oír, ver y recibir en cualquier lugar”.
La tecnología pone en contacto a los presentadores de Movida Gastronómica con sus seguidores en muchos países.
-Nos llaman al estudio desde distintas partes de España y desde otros países, y también interactúan con nosotros por las redes sociales. Tenemos seguidores de Venezuela, de Ecuador, de otros países de América Latina, de los Estados Unidos, de muchas partes.
Este magazín gastronómico se inicia con una presentación que comenta todas las redes sociales, y sigue con secciones como las noticias del fogón (noticiero gastronómico), entrevistas, talento gourmet, sano y nutritivo (espacio educativo) y más allá de los fogones (cultura y gastronomía). Todas se adaptan al invitado y al tema que se vaya a tratar.
-Mantenemos un esquema de funcionamiento con un guión previo. Siempre tenemos invitados al programa. A veces hasta dos. Lo más importante es que se sientan cómodos, como si conversaran sentados en una cocina, en un tono distendido, sin presiones.
Una condición en el camino
Verónica trabajó como actriz de telenovelas en Venezuela y por una entrevista que le hicieron, en la cual habló de su condición de diabética tipo I (insulino-dependiente) desde los 24 años, obtuvo la oportunidad de convertirse en imagen de varias campañas educativas dirigidas a ese tipo de pacientes.
Posteriormente uno de los laboratorios que la llamó para esta labor, la envió a Colombia a formarse como educadora para diabéticos, área en la que trabajó varios años y trabajo que sigue ejerciendo por vocación. Este aspecto de su vida se refleja en la orientación nutricional que aporta en los programas.
-La diabetes es una condición de vida, no una enfermedad en mi caso. No me limita. Comprendo el funcionamiento de mi cuerpo y lo cuido. Me adapto a las circunstancias.
Por ello Verónica dice que no tiene alimentos prohibidos, sino controlados.
-La gastronomía es un tema que me apasiona, primero porque me gusta comer, y también quizás es cuestión de familia.
Los abuelos italianos de Verónica Ortiz La Loggia, originarios de Lombardía, llegaron a Venezuela y se radicaron en el estado Cojedes (en la región central del país), donde instalaron pizzerías y negocios de delicatesses, lo que Verónica considera como los inicios de su familia en el mundo gastronómico.
-Aunque mi papá es de Carúpano, una ciudad del oriente de Venezuela, mi mamá es italiana. Ese mestizaje me paseó siempre por muchos sabores. Decidí buscar nuevas oportunidades a partir de 2016 fuera de Venezuela y me faltaba esa convivencia con la parte de la familia que permanece en Italia. Por ello me fui a Florencia y continué estudiando arte, ¿qué sitio podía ser mejor?
Después de tres años Verónica entendió que Florencia no es un sitio para el estilo de vida al que está acostumbrada. “Muy bello, pero demasiado dedicado al turismo. Por eso me vine a Madrid. Aquí está mi hijo y tengo más familia en esta ciudad, por lo que pensé que aquí podía desarrollarme profesionalmente”, dijo poco antes de entrar al estudio a emitir su primera Movida Gastronómica de 2020.
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