Vila-real y la provincia de Castellón tendrán siempre en su recuerdo a Joan Soler, que fallecía este miércoles. También COPE Castellón, emisora que fundó en 1967 dando voz a la diócesis de Segorbe-Castellón, recién creada y que no contaba con emisora de radio hasta ese momento.
Soler ha dirigido, además de COPE Castellón, COPE Valencia y ha sido director regional de esta red de emisoras en la Comunidad Valenciana, así como en las Islas Baleares. A su vez, formó parte del consejo de administración de la Cadena COPE. En los últimos años participaba en el magazine provincial dando su visión particular en ‘El Guindo’, emitiéndose por última vez el 6 de julio de 2018.
El periodista vila-realense es recordado por su profesionalidad; capacidad innovadora; libertad; lealtad y la formación de grandes profesionales que a día de hoy dirigen diferentes medios de comunicación o que incluso han llegado a presidir la Generalitat Valenciana, caso del actual jefe del Consell, Ximo Puig, quien también ha formado parte de la familia de COPE Castellón.
La valentía de Soler es otra de sus facetas que más se han destacado en los últimos días: El director-fundador de COPE Castellón fue capaz de oponerse al golpe de Estado comandado por el general Tejero el 23F. Una situación que podría haber truncado la entrada en la Democracia de España.
Soler dio una consigna clara aquella noche a los profesionales que trabajaban en la emisora castellonense para que se marcharan a sus casas ante la gravedad de la situación. Él no siguió esta recomendación y le secundaron Xavier Manzanet, Manolo Molina y Gonzalo Juan, pese a que ponían en riesgo sus vidas: «Nos quedamos y estuvimos dando una información recibida en cada momento de los despachos de las agencias de noticias nacionales y nunca leímos el bando» que obligaban en aquel instante a emitir los mandos militares golpistas, acompañados de marchas militares, recordaba en 2017 el director.
Durante toda aquella larga noche, COPE Castellón mantuvo emisión propia informando a toda la provincia de la situación real que se estaba viviendo en el Congreso de los Diputados, así como en las calles.
Este posicionamiento a favor del Estado de Derecho y de la Democracia fue reconocida días después cuando en todas las provincias españolas se efectuaron manifestaciones de protesta contra el golpe de Estado. En la organizada en Castellón, partidos políticos, sociedad civil, sindicatos… decidieron por unanimidad que fuera Joan Soler i Usó, el que leyera el manifiesto final.
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