El mundo del periodismo y la cultura ha despedido este sábado a la periodista Paloma Gómez Borrero, fallecida el sábado 25 en Madrid y a la que todos recuerdan como «la mujer más bondadosa» y la «maestra del periodismo» que se convirtió en «la mejor embajadora de España en Italia», donde trabajó durante año para TVE y para la Cadena COPE.
Hasta el tanatorio de la localidad madrileña de Alcobendas, donde a las 12.30 horas se instaló la capilla ardiente, se acercaron numerosos compañeros de profesión, como el presidente de RTVE, José Antonio Sánchez, quien ha dicho que «es parte de la historia y la tradición del periodismo», por lo que «se tardará muchos años en olvidarla».
También ha despedido a la corresponsal, de 82 años, su excompañera Nieves Herrero, quien ha dicho, emocionada, que todos están «en shock» y ha destacado su «grandísima profesionalidad».
Además, Herrero ha contado a la prensa que Gómez Borrero envió un mensaje hace dos días a los compañeros pidiendo que «no la olvidaran» pese a estar enferma, porque «tenía ganas de volver».
También ha acompañado a los familiares de la periodista el presidente de la Academia de la Televisión, Manuel Campo Vidal, quien ha recordado que hace meses le entregaron el «Premio a una vida», porque fue «pionera en todo», y ha destacado que fuera la primera periodista en entrar en el Vaticano, del que sabía «muchos secretos».
Su compañera Inés Ballester ha celebrado, muy conmocionada, que Gómez Borrero se haya marchado tras haber tenido una vida «muy feliz, intensa, vivida y divertida», en la que ha dejado «muchísimas anécdotas» con todos sus compañeros, para quien ha sido «una guía».
También pasó por el tanatorio la periodista Marta Robles (ex Onda Cero), para despedirla y «mostrar su admiración» hacia la persona «excepcional» que fue; y el presentador de televisión Ramón García (ex COPE y Punto Radio), quien ha dicho que «todos los que la despiden están tristes, pero no pueden evitar una sonrisa al
recordar tantos buenos momentos».
El periodista Alfredo Urdaci (13 TV) ha apuntado que era una persona «cercana» que «siempre hizo del periodismo una buena noticia», porque «tenía un compromiso muy firme con la verdad»; mientras que Rosa Villacastín ha tenido un recuerdo cariñoso, bromeando con que «a los papas los volvía locos, porque ella era quien organizaba todo».
La periodista Mariló Montero ha coincidido en que el mundo del periodismo pierde a una «maestra y un ejemplo» a la que «daban ganas de imitar» y que «sacaba chispa a todo»; mientras que su excompañera Inmaculada Galván ha agregado que «trabajó muchísimo, especialmente en un momento en que solo entraban hombres al Vaticano».
La actriz Loles León, a la que le unía una amistad desde hace años, ha puesto en valor «la defensa de la libertad» de la corresponsal, que era una mujer «fantástica» con «un sinfín de historias graciosas», mientras que la modelo Alba Carrillo ha manifestado que animaba a todo el mundo a «vivir su vida como quisiera».
Hasta el tanatorio se ha acercado también el padre Ángel, quien ha lamentado su pérdida argumentando que «estar con ella era estar alegre y contento, porque irradiaba su sonrisa».
Todos han coincidido en que era una «gran amiga», con una «sonrisa permanente» y un carácter «generoso y bondadoso», que le llevó a mostrar Roma y abrir las puerta del Vaticano a todos quienes le pedían ayuda.
En cuando a su carrera, los periodistas la han despedido como «un referente» conocido en todo el país y en otros países de Europa por su «gran profesionalidad» y su «enorme vocación».
Aunque todos se han mostrado conmocionados por su marcha, han ensalzado que en última imagen en televisión estaba bailando una canción de Vicky Larraz, como la mujer feliz y divertida que era y que hay que recordar.
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