Amigo Josep Lluis, hace dieciséis años que llegué a Lleida de la misma forma que llegaste tú, los dos veníamos del departamento de creatividad, tú de la SER y yo de la COPE.
Tú ya me llevabas ventaja y ya eras parte de esta magnífica ciudad, donde siempre me he sentido acogido, especialmente por los compañeros y compañeras de profesión.
Tú estuviste uno de los primeros directores que conocí, junto con el amigo Jesús, que hoy debe estar jodido como lo estoy yo.
Recuerdo los debates con tus alumnos de la UDL en la asignatura de radio, donde Jesús defendía la radio pública, yo la privada y tú escuchabas.
Previamente habíamos compartido mesa y un buen almuerzo, donde pactábamos el guión del debate.
De nuestras comidas han salido muchas ideas, como celebrar el día internacional de la radio, comidas en las que también participaban el amigo Ribé y el amigo Gimena, que también hoy están tristes, muy tristes, comidas donde hablábamos de todo y donde nos ponían en el día.
El último almuerzo fue a principios de verano y ahora estábamos pendientes de hacer otro, pero la vida nos da estas sacudidas, esos puñetazos que nos dejan fuera de juego. Tú marchas y nosotros nos quedamos jodidos, como si una tormenta o un terremoto nos hubiera pasado por encima.
Continuaremos amando la radio, continuaremos celebrando el 13 de febrero, intentaremos seguir haciendo las comidas, pero te echaremos de menos y te harás presente en nuestras conversaciones.
Tu recuerdo nos acompañará Josep Lluis, ha sido un auténtico placer compartir amistad y profesión y la gran familia de SER pierde uno de los mayores.
Nuestro sentido pésame por la familia y por los compañeros y compañeras Radio Lleida.
De parte de los compañeros y compañeras de COPE Lleida y COPE Catatalunya.
David Velasco
Tú ya no estás y florecerán las rosas, madurarán los trigos y el viento tal vez desvelará secretas melodías; tú ya no estás y el tiempo ahora me transcurre entre el recuerdo de ti, que me acompañas, y ese esfuerzo, que lo suficiente que conocías, de persistir cuando nada nos es propicio. Desde estas palabras muy tiernamente te pienso mientras la tarde suavemente declina.
Miquel Martí i Pol.
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