Como reza la cerámica que preside el nuevo estudio de radio ‘María Esperanza Sánchez’, ella es la voz del compromiso andaluz. Comprometida con Andalucía y con su conquista autonómica, 28-F que narró y que, en un ejercicio de justicia poética, en 2014 le premió con la Medalla de Andalucía, aunque otra cruzada por la igualdad, no sólo la territorial, sino la de género impregnó toda su vida…
De todo ello ha sido testigo el micrófono de su vida: el de la Cadena SER desde su querida Radio Sevilla a la que llegó en 1965 para llenar la antena de programas que marcaron época, como ‘La Tertulia Flamenca’ con el gran cantaor Antonio Mairena.
O la ‘Hora de la Verdad’ y su adorada ‘Tertulia Literaria’, con la que obtuvo el Premio Ondas y, más adelante, el ‘Club de la Tarde’.
Medalla al Mérito en el Trabajo porque nadie trabajó más que ella. Madre de miles joyitas radiofónicas y madre de su hijo Quino que, a punto estuvo de ver la luz en los estudios de Radio Sevilla, donde rompió aguas casi con el estreno de la democracia.
María Esperanza, directora también de programas nacionales, como ‘A Vivir que son dos días’ a principios de los 90. María Esperanza, editora, pero brilló como pocos entrevistando, el género que cultivó durante toda su trayectoria. También clave su labor como analista de la actualidad con su añorado Carlos Llamas y un plantel irrepetible en Hora 25. María Esperanza periodista y María Esperanza compañera, siempre generosa en los afectos, y en los elogios a otros gigantes coetáneos como Jesús Quintero.
Aunque la luz que le guió fue Iñaki Gabilondo con el que compartió muchos especiales, como la inauguración de la EXPO del 92, o el primer programa de radio que se hizo en el interior de la Alhambra en 2005, que fue paradójicamente uno de los últimos ‘Hoy por Hoy’ de Gabilondo. Y para especiales, las mujeres extraordinarias de ‘El Sacapuntas’, que han quedado para siempre en la memoria de los oyentes.
Mientras tanto, en Andalucía seguía sentando magisterio en ‘La Permanente’, Premio Andalucía de Periodismo o sus análisis y columnas en ‘La Ventana Andalucía’. Años en los que daba gusto verla levitar en la redacción escuchando a Aute, Miguel Ríos, Carlos Cano, Serrat o a Meryl Street, la actriz que también quiso ser, sin darse cuenta cuenta que que sacaba la actriz que llevaba dentro cada vez que recitaba, como estos versos a la Macarena que bien le podrían definir a ella: como tú, ninguna.
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