La desaparición de «La Vida Moderna» de la SER era una broma

La Vida Moderna

En elconfidencial.com leemos que el pasado mes de mayo, durante uno de los programas de La Vida Moderna, David Broncano, Quequé e Ignatius Farray soltaban una bomba a mitad de camino entre el cachondeo y una promesa: si el siguiente EGM revelaba que el programa había sufrido un descenso de oyentes, los tres cómicos presentarían su dimisión a la SER.



Tal y como contó El Confidencial el pasado 27 de noviembre, esa circunstancia se dio y el Estudio General de Medios reflejó unos datos en los que La Vida Moderna pasaba de contar con 69.000 oyentes diarios a 40.000 en su horario de entre las 4 y las 4.30 de la madrugada. Siguiendo con lo que habían prometido meses atrás, Broncano, Quequé y Farray confirmaban que dejaban el programa.

Desde entonces, la emisora ha estado programando ‘consomés’ en esa banda horaria, es decir, repeticiones de anteriores emisiones que han llevado a los seguidores de La Vida Moderna a pensar que, efectivamente, los cómicos habían cumplido su palabra. Pero dos semanas después de su última aparición, los tres han regresado a la palestra y han explicado qué ha pasado en este periodo de tiempo.

Teorías de la conspiración
El programa de este lunes 9 de noviembre ha puesto luz a esta polémica ausencia. Los tres cómicos explicaban que había habido muchas teorías de la conspiración según las cuales era una protesta contra la SER, que si ninguneaban a Broncano… pero todo era mentira: simplemente fue una broma a la que se unieron los propios directivos de la cadena.

Broncano ha explicado las reuniones con el director general de la SER, Daniel Gavela, intentándole hacer entender sus decisiones, pero también explicó la situación que se dio aquel día de mayo: en el mismo programa en el que prometieron abandonar La Vida Moderna si bajaban en el EGM, Iganitus hizo una salvedad: si lograban que ‘El Transistor’ bajara sus cifras de su programa en Onda Cero, ellos también se salvaban. Es decir, era la que ya es llamada ‘cláusula Transistor’: se salvaba el programa si la competencia también bajaba su audiencia.

Eso sucedió, ya que El Transistor ha perdido un 9% de su audiencia, por lo que Ignatius, Quequé y Broncano ya están de vuelta. Los amantes de este programa de culto, que tiene más audiencia en YouTube que en la radio, están de enhorabuena: los tres irreverentes cómicos han regresado a las ondas.

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