Caterina Moretti (22) estudió un año y medio en la Escuela de Locutores de Chile. Su proyecto final fue esta entrevista. Ambas creen que visibilizar la inclusión es una tarea pendiente.
Caterina Moretti Schröder tiene 22 años, vive en Las Condes y tiene Síndrome de Down. Esta última condición no fue una barrera para convertirse en locutora profesional. De hecho obtuvo un 6,5 en su examen final donde tenía la misión de realizar un programa de radio junto a un rostro de la política nacional. ¿La elegida? Cecilia Morel, la primera dama.
Durante 40 minutos en el late radial «Compartiendo Experiencias», grabado en dependencias de la Escuela de Locutores de Chile, ambas mujeres analizaron el panorama político del país, materias sociales y por supuesto, proyectos relacionadas con la inclusión. Todo eso mientras profesores veían atentos cómo se desenvolvía la, entonces, estudiante en rol de entrevistadora.
«Lo que más me gustó fue la acogida que tuve de parte de Cecilia Morel, lo sencilla y lo mucho sabe que sabe del tema de la inclusión», indica a Publimetro la, ahora, locutora radial.
Trabajo duro
Pero llegar a ese punto no fue fácil para Caterina. Ello pues a pesar de ser diagnosticada con Síndrome de Down, no hubo condiciones preferenciales para durante el año y medio que dura la carrera para que consiguiera su título.
«Mis estudios fueron duros, tuve que hacer el mismo esfuerzo que mis compañeros. No me hicieron ningún tipo de adecuaciones, fue todo con las mismas exigencias», relata.
Experiencia
En los últimos seis meses sus aptitudes la llevaron a conducir el programa «In Up», donde entrevistó a distintos empresarios, líderes de opinión y figuras del acontecer nacional.
Esa experiencia le jugó a favor y así al menos lo notó la primera dama. «Me impresionó cómo estructuró la entrevista; lo tenía todo escrito y le pone también de su cosecha: comentaba mis respuestas».
Aún así, para Morel hubo un momento de la conversación que la tocó. «Me preguntó, ‘¿qué grado de Síndrome de Down cree que tengo?’ Ni yo estaba preparada para una pregunta así, no supe mucho qué decir. Entonces respondió ‘tengo el Síndrome en todas y cada una de mis células, pero lo que yo más he tenido, son oportunidades’. Eso me llegó al alma».
Son pares
Pero no es todo. La primera dama afirma que es necesario considerarlos como un par. «No sigamos viéndolos con misericordia, ‘ay, qué pobrecitos’, no. Ellos son personas y tienen la misma dignidad que nosotros».
Caterina indica que eso es fundamental. «Rompemos mitos, esas etiquetas que dicen sobre las personas con Síndrome de Down, que son como angelitos o como niños, que no podemos escribir, que no podemos leer. Esta entrevista ayuda a todas esas personas para que crean en sus hijos y no en su diagnóstico».
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