Desde que nació, Norberto Atapuerca asegura escuchar la radio. Era algo habitual en su casa, tanto que con seis años creía que la radio estaba formada por una familia que vivía tranquila y a la que le gustaba hablar o poner música con un tocadiscos. Con los años ha ido guardando todos los obsequios que le han traído recuerdos imborrables: «Quizás tenga síndrome de diógenes, pero yo creo que doy importancia a las cosas que me han dado recuerdos imborrables, como Radio Bilbao».
Hoy, por fin, ha podido formar parte del programa Hoy Por Hoy Bilbao-Bizkaia junto a Azul Tejerina. De hecho, uno de los recuerdos más bonitos que guarda de la radio fue cuando Angel Mosterín, compañero de programas musicales, le permitió visitar la radio y ver un programa entero desde la sala de control. Entre todos los obsequios guarda también llaveros de la emisora, invitaciones del club del radio-oyente, entradas a eventos y conciertos, fotos de programas de la BBC que retransmitía la Cadena SER y, por último, el carnet de socio de Radio Bilbao.
Desde que nació, Norberto Atapuerca asegura escuchar la radio. Era algo habitual en su casa, tanto que con seis años creía que la radio estaba formada por una familia que vivía tranquila y a la que le gustaba hablar o poner música con un tocadiscos. Con los años ha ido guardando todos los obsequios que le han traído recuerdos imborrables: «Quizás tenga síndrome de diógenes, pero yo creo que doy importancia a las cosas que me han dado recuerdos imborrables, como Radio Bilbao».
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Hoy, por fin, ha podido formar parte del programa Hoy Por Hoy Bilbao-Bizkaia junto a Azul Tejerina. De hecho, uno de los recuerdos más bonitos que guarda de la radio fue cuando Angel Mosterín, compañero de programas musicales, le permitió visitar la radio y ver un programa entero desde la sala de control. Entre todos los obsequios guarda también llaveros de la emisora, invitaciones del club del radio-oyente, entradas a eventos y conciertos, fotos de programas de la BBC que retransmitía la Cadena SER y, por último, el carnet de socio de Radio Bilbao.
Socio de Radio Bilbao
Este carnet convertía a quien lo tuviera en socio de Radio Bilbao. Atapuerca se asoció en 1978 gracias a una compañera de trabajo, lo que le otorgaba una serie de beneficios sobre el resto de oyentes: fotos de los locutores de los programas, un seguro de accidentes individual de hasta 25.000 pesetas, descuentos en prestigiosos establecimientos, lotes de novelas, felicitaciones o esquelas radiadas, entradas para San Mamés, participaciones de sorteos de la lotería nacional, becas de gratuidad de estudios, localidades para teatros y plazas para viajes y excursiones.
Además de esto, cada seis meses regalaban entradas para el cine. La emisora cubría el gasto de la entrada y el espectador solo debía abonar el impuesto de la misma. Sin embargo, Norberto Atapuerca echa de menos las inocentadas que hacían antes los medios de comunicación, como cuando la Cadena SER ironizó con emitir en directo y también en color, cuando aún la televisión era en blanco y negro.
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