Luis Del Olmo visita la escuela que lleva su nombre en Ponferrada: «Sería un sueño que alguno de estos niños eligiera ser periodista»

Luis Del Olmo

Luis del Olmo visitó este miércoles el antiguo colegio La Puebla, que ahora lleva el nombre del mítico locutor berciano, y compartió una charla con los más pequeños.
Es la voz con la que crecieron generaciones de españoles, un referente sin el que sería imposible entender la radio en España. Durante los cuarenta años en los que dio los buenos días a España, Luis del Olmo nunca se olvidó del Bierzo, su ‘patria chica’, para la que siempre tenía un guiño y de la que fue –y sigue siendo– el mejor embajador.



Y el Bierzo no olvida. En los últimos años se han multiplicado los reconocimientos desde todos los ámbitos, la mejor muestra del cariño y la devoción que la comarca siente hacia su figura. El último ha sido el más simbólico, bautizar al antiguo colegio La Puebla, que ahora lleva el nombre del locutor y simboliza la huella cultural que deja en el Bierzo un rastro que debe inspirar a las nuevas generaciones.

Del Olmo visitó este miércoles el centro, donde fue recibido calurosamente por la comunidad educativa y por los más pequeños, con los que mantuvo una charla que ayudó a que el veterano periodista volviese a su más tierna infancia. «Ojalá el día de mañana tengan el mismo recuerdo que yo tengo de mi época escolar. Aún veo al primer profesor que tuve, Don José, que fue el que puso en mis manos un libro sobre la vida de Marconi y me abrió el camino hacia mi profesión», recordó.

De hecho, para el locutor sería «fantástico» que su visita haya conseguido que les pique el ‘gusanillo’ del periodismo. «Si alguno elige ser periodista y hacerlo en la radio espero que tenga la misma fortuna que tuve yo de poder hacer un programa y darle los buenos días a toda España. Sería un sueño. Si alguien me garantiza eso estoy dispuesto a dar el resto de mi vida», confesó.

Tras el acuerdo alcanzado en el Ayuntamiento de Ponferrada en el mes de diciembre del año pasado, la Junta de Castilla y León aprobó en marzo el cambio de nomenclatura, una modificación que fue propuesta y partió del propio Consejo Escolar del centro de la capital berciana, que tiene como objetivo recuperar el espacio que ha perdido con el paso de los años.

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