Belén Ferreras informa desde eldiario.es que las asambleas de trabajadores de las radios de EiTB -Radio Euskad, Radio Vitoria y Euskadi Irratia- decidirán este miércoles si aceptan la última propuesta de la dirección para poder desbloquear el conflicto y desconvocan los tres días de huelga previstos para este jueves 14 – coincidiendo con el pleno de política general con el que se inicia el curso parlamentario, donde hay programas especiales-, el día 26 de septiembre y el 19 de octubre. Tras una reunión de cinco horas entre la dirección y el comité intercentros, la empresa ha realizado una oferta en relación con varios puntos que tienen que ver con el desarrollo profesional de la plantilla y la conciliación, que han sido valorados “positivamente” por la parte sindical como un primer paso para desbloquear el conflicto y poder seguir negociando el convenio que está sin renovar desde hace 13 años. Pero la decisión última de desconvocar o no los paros queda en manos de las asambleas que se celebrarán al mediodía de este miércoles en los tres centros de trabajo de la radio pública vasca.
El comité convocó los tres días de huelga porque llevan “trece años sin renovar el convenio” y pese a que se han adecuado el trabajo de los profesionales de la plantilla a los nuevos tiempos, no así “las nuevas condiciones que ello implica”. Según ha informado el sindicato ELA, mayoritario en el comité, el pasado mes de junio, el comité intercentros de EiTB Media Irratia decidió dar por rotas las negociaciones del convenio que se iniciaron en abril. “En esa fecha, la dirección de manera unilateral impuso uno de los puntos de su plataforma que implica el incumplimiento de las condiciones de contratación ignorando la bolsa de trabajo. Anunciaba a su vez que sin reconocer los derechos de imagen de los y las trabajadoras de la radio en septiembre, comenzarían las retransmisiones del Boulevard de Radio Euskadi por ETB2”, apuntaron. Según aseguran, la dirección sabía del “rechazo frontal” de los trabajadores a las retransmisiones de la radio, ya que la plantilla de Gaztea ya había trasladado su renuncia a un nuevo proyecto de radio televisada sin negociación.
Estos movimientos de la dirección han sido “la gota que ha colmado el vaso de muchos años”, asegura Ana Arbulu, presidenta del comité intercentros, de ELA, en los que “el esfuerzo de los y las trabajadoras ha permitido a la radio pública vasca mantener unos niveles de calidad que no se corresponden con el reconocimiento al trabajo realizado”. En este sentido, ha denunciado que los cambios de turnos, la ampliación de funciones y las cargas de trabajo “se han moldeado según las necesidades de la empresa sin negociación ni compensación alguna”. “Se quiere hacer una radio del siglo XXI con una clasificación de los profesionales que no se modifican desde el año 1987”, y con una distribución de turnos que hace “imposible la conciliación”.
En este sentido considera: “Se aprovechan de que profesionales que saben que vamos a hacer nuestro trabajo para que el producto sea lo mejor posible aunque no esté ni compensado económicamente ni reconocido”. Por eso advierten de que “la gente está muy quemada”, aunque dan por sentado que la última oferta que la dirección ha puesto sobre la mesa -“que no es la primera con la que ha venido a la reunión de este martes”- puede ser un punto de partida para “recuperar la confianza y volver a negociar”.
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