E-noticies.cat publica: Más leña al fuego de la polémica por el logo de Catalunya Ràdio. El entorno de Junts, el partido de Carles Puigdemont, criticaron la nueva imagen corporativa de la emisora pública catalana.
Ahora sale a la luz lo que ha costado, y sus detractores se llevan las manos a la cabeza.
Desde su perfil de X, María Castellar señala que “el nuevo logo parece haber sido diseñado por la empresa Evil Love bajo adjudicación de 500.000 euros”.
Adjunta un enlace con el informe de contratación pública de la Generalitat.
“Independientemente de la calidad y el precio del logo”, dice la cuenta, “ya es hora de dejar de favorecer a las grandes empresas con fondos públicos”.
Y además, siembra la sospecha sobre un supuesto trato de favor a los creadores del logo. “Será casualidad, pero parece que el CEO de Evil Love y Álex Marquina, jefe de marca y promoción de la Corporació Catalana de Mitjans Audiovisuals (CCAA), tienen una relación estrecha”.
Despilfarro en la Corpo
El logo ha recibido muchas críticas, sobre todo porque elimina los colores de la bandera catalana. Personajes del entorno de Junts como Francesc de Dalmases y Pilar Rahola estallaron contra la nueva imagen.
Creen que se trata de un paso más del Govern en manos de ERC para desnacionalizar Catalunya.
En su delirio, llegaron incluso a comparar el nuevo logo de la radio pública catalana con el símbolo de las SS hitlerianas.
La campaña fue secundada por el ejército de juntaires en Twitter. Pero causó también estupefacción entre muchos usuarios atónitos ante la polémica que se habían sacado de la manga.
En todo caso, llama la atención la elevada suma por la confección de un logo que, además, genera un gran rechazo. Esto pone al descubierto el despilfarro sistemático en los medios públicos catalanes.
Una situación que se mezcla ahora con la sospecha de favoritismo.
Acusaciones de favoritismo
La mencionada cuenta lamenta que “profesionales independientes o pequeñas empresas no podamos participar en estos concursos públicos”.
Argumenta que piden muchos requisitos que acaban siendo disuasorios. Unos requisitos que, según otros usuarios, sirven para favorecer a empresas amigas.
“Y aún es más triste que la propuesta fuera evaluada por un comité de expertos, todos ellos recibiendo un buen sueldo, y el resultado ya vemos quien es”, dice Castellar.
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