Deia.eus publica: Las verdades del barquero, esa es la materia prima con la que trabajan los medios de comunicación. Si las cuentan alcanzan un estado zen. Buena prueba de todo esto pudo comprobarse ayer en el hotel Carlton que dirige Alberto Gutiérrez, donde se celebró la VI edición de los premios de la Asociación de profesionales de radio y televisión de Euskadi. Los Premios Airean Sariak. Les cuento.
Sintonice el lector la buena onda y oigámosle a Iñaki Gabilondo en su primera aparición para recoger el premio Leyenda. Cuando Agustín Herranz comenzó a evocar el pasado la réplica fue morrocotuda. “Todo lo que empieza con un ¿te acuerdas de…?”, dijo mientras cabeceaba ente dudas. Habló con la soltura de siempre y abrochó su discurso con un “soy de la Real y de los pocos que conocen y quieren mucho al Athletic”. Como es costumbre en él, se ganó a la audiencia poco después de que le entregase el galardón Asís Canales, voz cantante de Iberdrola.
Minutos antes el alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, había entregado a Joseba Solozabal el premio al mejor programa de televisión por su trabajo en La Kapital. Reconociéndose como un privilegiado por los 40 años de periodismo libre que lleva a cuestas reconoció que 2023 no ha sido para él un año de luz. Confesó haberlo pasado mal en su cabeza y haber recurrido a ayuda profesional. Llovieron los aplausos.
Para entonces la gala, que arrancó con las campanudas voces del Biotz Alai y se abrochó con un Boga, boga del mismo coro, como si se hubiese programado con un armónico capicúa, ya volaba alto. Había comenzado con un premio al programa de radio Pompas de papel, donde el presidente de Unicef en el País Vasco, Isidro Elezgarai, coronó a Iñaki Calvo, Roberto Mosso o Félix Linares entre otras voces culturales. El propio Agustín recogió el premio a una trayectoria televisiva como la de Ana Blanco (la periodista no pudo acudir porque le acaban de conceder el joystick de Informe Semanal…) y el director del centro territorial de Televisión Española, Iñaki Díez, se hizo con el premio Retransmisión por las tres etapas del Tour que tiñeron nuestras miradas y nuestro corazón en amarillo.
¡Qué duro resultó escucharle a Josu Loroño! Él elogió la figura de Luis Fernando Baranda, fallecido el pasado mes de abril (cuántos cigarros y Athletics compartidos, Luisfer. Y cuántos nos han quedado…) ante Floren Mancisidor, capittano de Onda Cero. El director del hotel Carlton, Alberto Gutiérrez, entregó el oro de la tarde al mejor presentador de radio del curso, Xabier García Ramsden, quien elogió la valentía de apostar por la juventud en los medios. La periodista Amaia Goikoetxea, presidenta de la Asoiación Vasca de Periodistas, concedió a Aitor Albizua las credenciales como mejor presentador de televisión por su trabajo en El comodín, justo ahora que acaban de darle matarile.
¡¡¡Gol, gooool, goooool!!! Cuando se anunció que el premio a la radio deportiva se posaba en Dani Garrido y el Carrusel deportivo que él logra que gire y gire sin marear (el otro Dani, el futbolista, le puso la medalla…) el auditorio rompió en una salva de aplausos que creció, si me permiten decirlo, cuando se recordó que Silvia Intxaurrondo protagonizó el minuto de oro de este año en aquella interviu. Silvia lucía el galardón puño en alto, como si fuese una medalla olímpica, entregada por Álvaro Parro, de Laboral Kutxa.
Testigos de todo lo contado fueron José Ángel Iribar, Andoni Goikoetxea, Itziar Urtasun, Asier Abaunza, Yolanda Díez, la vicelehendakari Idoia Mendia, Iñaki Basabe, José Antonio Nielfa, La Otxoa; Joserra Taranco, Tomás Sánchez, Koldo Bilbao, Elena Moreno, Txus Diharze, Manolo Delgado Begoña Marañón, Begoña Beristain, Patxi Herranz, maestrante de la gala; Eduardo Velasco, Maite Goñi y otra buena gente.
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