Hoy es lunes 13 de febrero, hoy se celebra el Día Mundial de la Radio. Una celebración de todos, de los que estamos aquí al pie del cañón, disfrutando de un medio que no es comparable con ningún otro, y de los que estáis ahí y habéis integrado la radio en vuestras vidas como canal imprescindible de información de entretenimiento y, lo más importante, de compañía.
Y para nosotros, suponemos que también para vosotros, es un motivo de profundo orgullo comprobar, cuando llegan fechas como ésta, la fortaleza, la capacidad de adaptación, incluso la capacidad anticipación con la que la radio afronta los cambios sociales, las nuevas demandas de información, o esa labor tan necesaria de separar el trigo de la paja en unos momentos de tantos mensajes intoxicados.
Y a pesar de todos los cambios, de todas las transformaciones, una esencia que permanece inalterable. Una radio que hoy, igual que hace 90 años cuando empezó emitir esta emisora, Radio Rioja, lo tenía y lo tiene muy claro: esto va de contar cosas, pero, sobre todo, va de escuchar. Porque solo escuchando a la sociedad, a la calle, al oyente, solo así se puede hacer buena radio.
Un medio en constante evolución
Hemos comenzado nuestra reflexión sobre la radio con un indicativo de unas cuantas décadas de antigüedad en el que una locutora (de las de antes) nos invitaba a escuchar Radio Rioja ‘a través de la onda media y de la modulación de frecuencia’. Hoy nuestra radio, después de adaptarse a los cambios que la sociedad misma ha experimentado, puede escucharse en las aplicaciones para móviles, en las redes sociales, en la página web, sosegadamente en la radio a la carta que nos brinda un podcast… Y seguimos transformándonos, ampliando fronteras. Ya hemos puesto en marcha un sistema de notificaciones a través del cual la aplicación nos avisará de las novedades de contenidos que se vayan incorporando. Y dentro de una semana, coincidiendo con la celebración de la gala de los III Premios Radio Rioja, comenzaremos a enviar cada mañana una newsletter con los asuntos más destacados de las últimas horas.
En este Día Mundial de la Radio, seguimos, por lo tanto, fieles a la esencia del medio, pero en una constante búsqueda de nuevas fórmulas que sigan acercándonos cada día a los oyentes. ¡Vila la radio!
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