José Luis Camacho Malo le ha entrevistado para diariodehelva.es: Ya tenia ganas que se acercara por esta tribuna pública mi amiga Aurora García González, quien nace en Huelva el 10 de septiembre de 1981.
Estudia en el colegio Santo Ángel. Hermana pequeña de Elena. Hija de un matrimonio muy querido por todos, José Antonio García y Pepa González. El padre por sus profesiones, aunque ya están los dos jubilados, y ahora por estar muy comprometidos e implicados socialmente.
Aurora es técnico en empresas y actividades turísticas por la antigua Escuela Superior de Turismo de Huelva, máster en gestión de empresas turísticas por la UHU. Trabajó en el sector turismo durante un corto periodo de tiempo.
Comenzó su carrera laboral en la Cadena SER como asesora de publicidad en el año 2005, posteriormente Odiel Información, El periódico de Huelva y CNH, hasta que de nuevo recibió una llamada de su antiguo compañero en radio, ahora actual gerente de ventas, Víctor Ortiz, al que quiere mucho como compañero y amigo, preguntando si estaría dispuesta a volver a su primera casa. Sin pensarlo volvió a la Cadena SER, la casa que le ha enseñado a conocer la radio de verdad, sus entrañas, su magia, los eventos y congresos, que le encantan y dónde se siente muy cómoda, aunque estos últimos eventos se trabaje mucho y que cada día son más y más variados…
Me decía la protagonista de esta entrevista que la radio donde ella trabaja acaba de cumplir 40 años y que obviamente podría decir que lleva casi media vida en ella.
Madre de Marta de 7 años y de Nachete de 5, ocupan la mayor parte de su tiempo junto con la publicidad y la radio.
Aurora como persona es de lo más entrañable, además tiene el cielo ganado, no en vano ha trabajado con Curro León. Aparte de esta broma, nuestra invitada de hoy es cordial, optimista por naturaleza, buena amiga, profesional y compañera, servicial, risueña, disfrutona, observadora, empática y buena gente.
En principio era reacia a dejarse entrevistar, pero una vez que empezamos, la veo ilusionada y empezamos así:
- ¿Qué opinión tienes de la situación que estamos viviendo?
- A día de hoy, esta pregunta es arriesgada jejeje. No me veo representada por la clase política, la vida actual es muy difícil para los jóvenes y los no tan jóvenes. Tengo una pérdida de confianza total en la política actual, a nivel global.
- Existe una sociedad a día de hoy, carente de valores, cortoplacista, dónde no se prima el esfuerzo por nada. Egocentrista, donde todo el mundo va a lo suyo. Es difícil encontrar ayuda en lo personal e incluso en lo profesional.
- Las subidas de los productos, las energías etc, ha hecho actualmente que estemos constantemente intentando sobrevivir para llegar a fin de mes. Siendo, aún así, una sociedad del “bienestar” quizás fruto de esa supervivencia de que todos quieren “barrer a casa”.
- ¿Cómo crees que ha cambiado la vida después de más de 2 años de pandemia?
- Afortunadamente todo a mejor. Hemos tenido una primera parte del año donde hemos podido volver a vivir lo que nos gusta, lo que antes era lo ordinario casi se ha convertido en un tiempo extraordinario donde ha vuelto acertadamente la normalidad que todos necesitábamos tanto en nuestras vidas, en nuestro día a día, como en nuestros puestos de trabajo etc. Estos dos años hemos aprendido mucho más de lo que nosotros mismos nos damos cuenta y por su puesto, quién nos ha dado una lección de todo han sido los niños.
- ¿Has pasado miedo en algún momento?
- Claro, al principio cuando todo era muy desconocido. No sabíamos cómo íbamos a poder llevar ese confinamiento inicial, cuando a mediados de marzo nos informan del cierre de colegios, de guarderías… todo era una incertidumbre abismal, que sentimos muchos ciudadanos. En mi caso no sabía cómo iba a poder compaginar la vida laboral con todo aquello. Aquel lunes nos informan desde la emisora, que las directrices del grupo son que hagamos, en su mayoría, teletrabajo (con todo lo que eso conlleva) tanto la mayoría de mis compañeros como yo, comenzamos una etapa dura, trabajando, en mi caso, con dos niños pequeñitos en casa.
- Algunos compañeros hacían sus programas desde una habitación de su casa. Yo al menos trabajo en la parte que no se escucha… Los días se hacían duros e interminables porque cuando acababas con la supervivencia ante el ordenador de finalizar tu jornada, tenías que reinventarte y pensar en la manualidades y juegos del día, después de haber tenido dos o tres “teams” con Nachete en brazos y Marta aprendiendo a leer.
- Todo ello teniendo en cuenta que las cartulinas y los materiales se acababan en casa y el material para los niños era más valioso que aquella broma del papel higiénico. Afortunadamente sentí el calor de mucha gente que me ayudaron, vecinos, amigos, mis padres que, sin dudarlo, me dejaban la compra en la puerta. En el mejor de los casos podía atender en algún rato del día una llamada de alguno de ellos y me sacaban una sonrisa.
No fue un tiempo fácil, pero tenemos la habilidad de olvidar lo duro con mucha facilidad y quedarnos con lo positivo. Y así ha sido en mi casa. Hemos aprendido mucho de toda esta situación que nos vino impuesta y a valorar el tiempo de otra forma. - ¿Qué proyectos tienes para el futuro?
- Mi futuro me lo planteo muy parecido al actual, siempre pensando en mis hijos que se hagan grandes de estatura y corazón, que sean felices y buenas personas.
También me planteo algunos retos personales a corto plazo, confiando en una misma para siempre poder alcanzarlos y si no es así aprender siempre en el camino. - ¿Qué anécdotas guardas especialmente de tu vida profesional?
- Pues en la radio que es donde más tiempo he pasado de toda mi etapa profesional podría contar infinidad de anécdotas. Buenas muchas. La radio, por decirlo de alguna manera es adictiva. Te duermes pensando en las tareas pendientes y te levantas con mil proyectos, que, con suerte, algunos se pueden culminar en el día.
Me quedo con experiencias tan gratificantes como participar como jurado cada año en la elección de las 12 Uvas de la SER, los premios Cruz de Guía y algunos otros.
Los ratos de convivencia con mis compañeros en los Congresos del Bienestar, trasladando a cantantes de primer nivel y hablando con ellos como si de un conocido se tratara.
Malas, alguna que otra, como el ataque informático que recibimos en noviembre de 2019 que atacó a toda la red Nacional de la Cadena, perdimos muchísimas cosas e información de valor, donde hubo que hacer un trabajo muy duro. Desde la emisora central hasta llegar a plazas más pequeñas como Huelva. Finalmente y afortunadamente, todo se fue solucionando, aún sabiendo de la envergadura del problema, gracias a la labor de todos los técnicos y aquí en Huelva, gracias al alma de la técnica de la Radio, mi gran compi Enrique Domínguez, que siempre está cuando se le necesita. - ¿Qué recuerdos guardas de tu niñez y qué soñabas ser de mayor?
- Pues de pequeña creo que soñaba con ser cantante o algo parecido, me pasaba todo el día cantando y me sabía letras de canciones que mi madre no sabía dónde las aprendía. De “la radio” supongo porque YouTube y Spotify no existían jejeje . La realidad es que canto muy regular y ese don no lo tengo, jajaja pero me encanta la música de todo tipo. Mi lista de canciones favoritas es muy variada. Por mí play list no podrías saber si soy flamenca, rockera, rapera, salsera, clásica … O que me guste el reguetón.
Los recuerdos de mi niñez los tengo presentes como si fueran de ayer mismo. Días de campo con mis primos, comidas con todos reunidos mientras le gastábamos bromas a mi abuelo.
Viajar con mis padres a lugares maravillosos y grandes ciudades (dónde me daban unas palizas de turista avanzado) mi colegio y mis amigas, de las cuales, afortunadamente, aún mantengo algunas e inmejorables de mi infancia. - ¿Qué significa para ti el mundo de la radio y la publicidad?
- No sé … pero creo que mi padre es el culpable de mi “afición” a la radio. Siempre me hablaba de sus colaboraciones en las emisoras de entonces, Radio Juventud de Huelva, Radio Popular… también en los periódicos de la época, pero la radio era su debilidad.
De pequeña, lo escuchaba levantarse con la radio, ducharse con la radio, acostarse y dormirse con la radio …
Por supuesto la canción del «Larguero» yo la tenía que cantar. Ahora programo cuñas en esos programas, que yo no sabía ni muy bien de que iban, pero la canción me resultaba simpática.
Hasta me callaba para escuchar que contaban cuando realmente no entendía ni de fútbol,aunque mi padre siempre me llevaba al antiguo estadio Colombino y lo acompañaba cada domingo a los partidos. Del Recreativo si sabía y mucho, pero de lo que hablaba por aquel entonces José Ramón de la Morena, pues casi que nada. Mi padre me inculcó ese amor por el Recreativo que aún tengo y hablar del Recre me lleva a mi infancia y aquel antiguo estadio con partidos que recuerdo con el Sevilla y otros que me subían la adrenalina.
En la radio trabajamos mucho, pero lo que es más importante, también lo pasamos bien. En mi trabajo tengo la suerte no sólo de tener grandes compañeros, sino también de tener buenos amigos, algunas se han quedado por el camino, pero siguen presente en mis días. - ¿Cuáles son tus aficiones preferidas y a qué dedicas el tiempo libre?
- Salir con mis hijos, enseñarles lo bonita que es nuestra ciudad y sus tradiciones. La Semana Santa, el Rocío, el sol, el mar, disfrutar de la playa, comer con mis amigos. Fines de semana con muchos planes y siempre presentes mis hijos, mi familia y mis amigas que nunca me han soltado de la mano.
Viajar cuando se puede y disfrutar de la tranquilidad y la calma que me aporta mi pareja. - ¿Qué significa para ti Huelva?
- La ciudad en la que nací y de la que me siento orgullosa de ser. Pero aún estando orgullosa de ser de Huelva, también siento la discriminación, a la que históricamente hemos estado sometidos.
No es el momento de hablar de la influencia negativa que siempre supone nuestra vecindad con otras provincias, en muchas materias, pero ya es hora de que nuestros representantes se acuerden de este rinconcito de Andalucía y de España, donde hay de todo, más allá de cuando necesitan y nos piden el voto. Decepción es la palabra. - ¿Quiénes han sido tus referentes en la vida personal y profesionalmente?
- Mi referente en la vida es y será siempre mi madre. Aspiro algún día parecerme mucho más a ella y ser tan entregada a todos de esa forma tan incondicional que ambos tienen.
Siempre digo, cuando me dicen que me parezco a mi madre, que es el mejor piropo que me puedan decir. Tengo muchos referentes más en mi familia. Mi hermana Elena es otro de ellos.
En mi mundo laboral, cada día aprendo de todos y cada uno de mis compañeros, tanto de mi departamento, como del resto de la emisora. - ¿Con qué personaje te gustaría compartir una cena y que le preguntarías?
- Pues creo que compartía una cena con mis cuatro abuelos que ya no están y les contaría muuuchas cosas, que me hubiese gustado que hubiesen visto desde aquí abajo. Que pudieran darles un beso a mis hijos. Por lo que, en la cena, seríamos al menos siete! Les hablaría de mis hijos con la baba caída y a ellos seguro que se les caería más aún. Echo mucho de menos los besos de mi abuelo Rafael, los pellizcos de mi abuelo Pepe, aunque fue el primero que se fue al cielo y yo era más pequeñita. La complicidad de mi abuela Pepita, porque iban a llegar mis padres y yo no había abierto la mochila de las tareas. Y las conversaciones interminables de mi abuela Margarita, que contaba historias de su vida con el mismo ímpetu que si fuera la primera vez.
Aurora ha sido un placer haberte tenido en esta serie de entrevistas, me alegra verte feliz, ilusionada y tan madraza.
Un abrazote grande amiga
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